Educación financiera y ambiental, una buena enseñanza para los más pequeños
Saber cómo controlar los gastos o la importancia del ahorro es algo que debe aprenderse desde pequeños. Sin embargo, existe una falta de educación financiera que genera problemas en los adultos, aunque esto puede solucionarse si incorporamos estas enseñanzas en la infancia.
Es tan importante la educación financiera que diferentes organismos, como la OCDE y el Ministerio de Educación, recomiendan que se incluya en el currículo escolar. Con este fin, el Banco de España ha elaborado un Plan de Educación Financiera para incorporar estos contenidos en la enseñanza secundaria obligatoria.
También hace falta educación ambiental porque los recursos naturales que necesitamos para desarrollar nuestra vida diaria son limitados y hay que saber gestionarlos.
Cómo incluir la educación financiera y ambiental en la enseñanza
La falta de educación financiera es un problema real en España. Según un informe de Funcas, el 36% de la población admite que no sabe lo necesario para tomar decisiones financieras porque no ha adquirido los conocimientos básicos. Entre los adolescentes la situación es similar, 1 de cada 4 no tiene ningún conocimiento sobre finanzas, según el informe PISA. La solución está en incorporar la educación financiera y ambiental en la escuela.
¿Dónde se pueden incluir estos conocimientos? En las asignaturas de matemáticas y ciencias. Las matemáticas sirven para conocer los cuatro conceptos básicos: gastos, ingresos, ahorro e inversión. Se empieza por aprender a hacer un presupuesto personal, diferenciando gastos, ingresos y ahorro a través de operaciones simples. Más adelante, cuando se estudian los porcentajes, se comprende mejor el impacto que tienen los tipos de interés en las inversiones, los préstamos y las hipotecas.
No solo es la educación financiera, sino también la ambiental. El objetivo en la educación ambiental es concienciar y sensibilizar sobre los problemas medioambientales. A través de las asignaturas de ciencias se aprende la necesidad de conservar la energía, reducir los residuos o a entender qué es la huella de carbono, un aspecto fundamental de las finanzas sostenibles. Las ciencias nos ayudan a descubrir el impacto ambiental que tienen las decisiones financieras y, por ejemplo, cómo invertir en empresas sostenibles contribuye a la mejora del medio ambiente.
Cómo incluir la educación financiera y ambiental en la enseñanza
La educación financiera y ambiental se debe abordar también en casa, hablando a los niños del dinero y enseñando a manejarlo desde que son pequeños y con actividades relacionadas con una forma de vida sostenible.
Estas son algunas estrategias que puedes poner en práctica en casa:
Regalar una hucha para fomentar el hábito del ahorro.
Dar una paga, según su edad, para saber cómo gestionar su dinero.
Enseñar a comparar precios cuando vas a la compra para aprender a consumir de forma responsable.
Utilizar juegos didácticos como el clásico Monopoly para descubrir la inversión y cómo obtener ganancias con la inversión o aplicaciones como Savings Spree o Celebrity Calamity.
Abrir una cuenta en un banco a su nombre cuando son adolescentes para organizar sus finanzas.
Aprender a reciclar cada residuo en su contenedor y a reutilizar los objetos dándoles una segunda vida.
Apagar las luces y aparatos eléctricos que no se necesitan para reducir el consumo de energía.
Impulsar un estilo de vida saludable realizando actividades en la naturaleza o participando en actividades como recogida de basura en el campo lo que ayuda a saber el daño que la basura produce en la naturaleza.
Fomentar el consumo responsable, explicando la diferencia entre un producto necesario y un capricho.
Iniciar hábitos de consumo más ecológicos como optar por una ducha en lugar de un baño o cerrar el grifo cuando se lavan los dientes para evitar el despilfarro de agua.
Visitar granjas y viveros para saber cuidar a los animales y las plantas.
En resumen, aprender desde pequeños educación financiera y ambiental ayudará a ser adultos responsables, a manejar mejor las finanzas y a apostar por la sostenibilidad en sus inversiones.