Los inversores peinan la bolsa en busca de acciones que estén a un precio inferior a su valor.
Obtienen rentabilidad cuando, transcurrido un tiempo, sube su precio y las venden. Pero cuidado porque los
impuestos de la compraventa de acciones reducen el posible
beneficio.
¿Qué es una acción?
Una acción es una parte proporcional de una empresa. Al constituir una
sociedad su capital se divide en
fracciones de igual valor —acciones— y estas fracciones se reparten entre los diferentes socios o
accionistas que, desde ese momento, pueden vender sus acciones a un tercero:
Si es una empresa cotizada: en cualquier momento en la bolsa de valores.
Si no es una empresa cotizada: si lo permiten sus estatutos y de acuerdo a
ellos.
Nos quedamos con la idea clave de que cuando compramos una acción de una empresa, estamos adquiriendo
títulos que nos convierten en dueños de una parte de ella.
Si compro acciones, ¿tengo que pagar impuestos?
Un inversor compra una acción de una empresa porque cree que en ese momento su precio
es inferior a su valor. Cabe recordar que el precio de una acción lo asigna el mercado en
función de la oferta y la demanda. El
inversor confía en que con el paso del tiempo el precio aumentará.
En la compra de acciones no hay que pagar impuestos, sin embargo, si se venden con
ganancias sí habrá que
tributar en el IRPF, además de algunos casos en los que se grava en el impuesto sobre Patrimonio.
¿Cuánto se paga de impuestos por la venta de acciones?
La rentabilidad de la compraventa de acciones depende del precio de compra y del
precio de venta, como es
lógico. Pero, además depende de las comisiones que lleve asociada cada
orden de compra y de venta, de la
comisión que cobre la entidad por custodiar las acciones y, por último, de
cuántos impuestos hay que pagar
por ellas.
Plusvalía: ¿cómo tributa la venta de acciones en el IRPF?
La plusvalía es la diferencia entre el precio de compra más los gastos necesarios para esa compra menos el
precio de venta y menos los gastos necesarios para esa venta. Así que, si en un ejercicio se venden acciones
y hay ganancia —plusvalía— entonces hay que pagar IRPF en la próxima declaración de la renta.
¿Cuánto? Pues
habrá que sumar las ganancias y restar las pérdidas de todos los elementos patrimoniales vendidos durante el
ejercicio y aplicar la escala impositiva para las rentas del ahorro.
Dividendos: ¿cómo tributa la venta de acciones en el IRPF?
Por último, también tributarán las acciones en el IRPF si han pagado
dividendos: metálico o dividendo en
acciones (scrip dividend).
Metálico
Si se cobra el dividendo en efectivo, ingresado en la cuenta del inversor, se considera rendimiento del
capital mobiliario y su cuantía sumará en la base imponible del ahorro,
siguiendo la misma escala de
gravamen para rentas del ahorro.
Dividendo en acciones
El cobro de dividendos en acciones o scrip dividend permite al accionista elegir si prefiere recibir como
contraprestación nuevas acciones de forma gratuita o derechos de
suscripción.
Si recibe nuevas acciones: no tributarán en el IRPF hasta que se vendan. Cuando se vendan
sumarán en la base imponible del ahorro.
Si recibe derechos de suscripción: no tributarán en el IRPF hasta que se vendan. Se pueden
vender a la propia empresa o en el mercado y la cantidad obtenida será también parte de la base
imponible del ahorro.
Patrimonio: ¿hay que declarar la compra de acciones?
Mientras se mantengan las acciones y no se vendan, no hay que pagar IRPF. Habría que
tributar por el
impuesto sobre el Patrimonio, con matizaciones: solamente en algunas comunidades autónomas y
siempre que a
31 de diciembre la suma de todos los bienes supere los 700.000 euros, sin incluir la vivienda habitual
(máximo 300.000 euros). Se aplica una escala que varía según la región y oscila entre
el 0,20% y el 3,5%.
