Estrategias de inversión ING - Aprende a invertir como Ulises

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¿Qué pueden aprender los inversores de hoy de Ulises en la Odisea?

¿Qué sabía Ulises de inversión? Probablemente nada… Pero sí sabía y aprendía de cómo suceden los acontecimientos en la vida. Y aunque Homero la escribiera alrededor del siglo VIII a. C., contiene conocimiento muy útil para el siglo XXI, para nuestra vida, y por supuesto, para invertir mejor.

Circe salva a Ulises de la muerte

En la Odisea (canto XII), Homero cuenta como la diosa Circe advierte a Ulises de que van a pasar por una zona habitada por sirenas, y lo que debe hacer al respecto para no morir:

"Primero llegarás a las Sirenas, las que hechizan a todos los hombres que se acercan a ellas. Quien acerca su nave sin saberlo y escucha la voz de las Sirenas ya nunca se verá rodeado de su esposa y tiernos hijos, llenos de alegría porque ha vuelto a casa; antes bien, lo hechizan éstas con su sonoro canto sentadas en un prado donde las rodea un gran montón de huesos humanos putrefactos, cubiertos de piel seca. Haz pasar de largo a la nave y, derritiendo cera agradable como la miel, unta los oídos de tus compañeros para que ninguno de ellos las escuche. En cambio, tú, si quieres oírlas, haz que te amarren de pies y manos, firme junto al mástil -que sujeten a éste las amarras-, para que escuches complacido, la voz de las dos Sirenas; y si suplicas a tus compañeros o los ordenas que te desaten, que ellos te sujeten todavía con más cuerdas."

Gracias a estos consejos, Ulises consigue pasar de largo, después de haber oído los cantos de las sirenas, y acaba llegando de vuelta a su casa, donde le esperaban su mujer, Penélope, su hijo, Telémaco y su fiel perro Argos, ya ciego.

El comportamiento de Ulises contiene una gran enseñanza: si sabemos que vamos a pasar por alguna situación inevitable, que es negativa para nosotros, lo mejor que podemos hacer es prepararnos de antemano, en frío, para asegurarnos de evitar las decisiones equivocadas en caliente.

Algunos grandes inversores también han seguido sus consejos

Benjamin Graham, el mentor de Warren Buffet, también era consciente de esto, porque con frecuencia, los mercados se comportan de forma irracional y las emociones llevan a muchos inversores a tomar decisiones en los peores momentos, de las que luego se arrepienten:

Cuando la bolsa no para de subir, las noticias hablan cada día de la evolución de las acciones, y a nuestro alrededor la gente se interesa cada vez más por la evolución del mercado en general, o de algunas acciones en concreto, podemos tener la tentación de invertir todos nuestros ahorros, pero después de grandes subidas hay más riesgo de que se produzca alguna caída.

Cuando los mercados caen con fuerza y parece que tener dinero invertido es una locura, porque a nuestro alrededor vemos que todo el mundo está asustado y vendiendo sus inversiones, puede que creamos que debemos vender, pero muchas de las mayores subidas se producen unos días después de las mayores bajadas.

Para evitar que los que invierten pierdan dinero en este tipo de situaciones creó un “Contrato del propietario de inversiones”, que incluye en su libro El inversor inteligente. Algo así como un “Contrato de Ulises”. En él, el inversor racional, que tiene claro a qué plazo quiere invertir y cuál es su estrategia de inversión, hace un contrato consigo mismo, en el que se compromete a no cambiar su estrategia de inversión cuando el mercado suba o baje con fuerza. Porque históricamente sabemos que cada cierto tiempo los mercados viven situaciones de pánico y euforia, y dejarnos llevar por ellas es, casi siempre, una mala decisión.

El contrato de Ulises para el inversor de hoy

Tener algún tipo de compromiso en este aspecto puede ayudarte a gestionar tus emociones en esos momentos en que la mayoría pierde la calma. Por ello, hemos preparado este contrato (un contrato contigo mismo), inspirado en el de Graham, que deberías tener a mano cuando quieras actuar por impulso ante los movimientos de la bolsa.

Descarga aquí tu contrato Ulises.